Nuestro estado de ánimo varía a lo largo del día. Bien porque nos ha ocurrido algo por culpa de terceras personas, por cansancio, por preocupaciones o por estrés, nuestro ánimo puede decaer. Cuando nos encontramos en esa situación un día maravilloso, como son todos los días de la vida, se convierte en un mal día, no se ven soluciones y nos ponemos tristes, lo cual afecta directamente a nuestro bienestar. A continuación, te daremos las herramientas necesarias para que puedas levantar el ánimo rápidamente, ya sea a ti mismo o a otra persona. ¡Sigue leyendo!
Cómo levantar el ánimo en pocos minutos
Ten en cuenta que todo es pasajero, hasta los peores sentimientos se asimilan pasado el tiempo y se convive con ellos. Entonces, ¿por qué vas a dejarte llevar por una pequeña eventualidad en tu día? Sigue los siguientes consejos para levantar el ánimo rápidamente y retoma tu día a día con la energía y la ilusión que necesitas:
Ríete de ti
Ríete de lo que te está sucediendo. Todas las situaciones tienen varias perspectivas, utiliza la del humor, verás que seguramente la cosa no es tan grave y podrás combatir el mal humor fácilmente. Ríete, baila, escucha chistes o cuéntalos tú, toma una copa con tus amigos o a solas, en ocasiones puedes conocer a personas realmente interesantes que cambiarán tu día sin haberlo esperado.
Acércate a quien te hace sentir bien
Ese amigo o amiga, tu mascota, tu familia… Verás que todos tienen una vida, incluso los animales, y que se encuentran con dificultades todos los días. Déjate querer un rato y te sentirás mucho mejor.
Sal al aire libre
Camina, corre, ve en bicicleta, nada en el mar, en el río o en un lago. El aire libre hará que se despejen los pensamientos que hacen que tu ánimo decaiga. Practica ejercicio físico para mejorar tu bienestar emocional y estar en forma.
Hazte un regalo
Te lo has ganado, has aguantado la situación que te ha hecho entristecer y le has hecho frente, ahora mereces un premio. Mímate y date un capricho de vez en cuando.
Haz una buena acción y empatiza con los demás
Ayuda a quien te necesita, tú te sentirás mejor y la otra persona también. Asimismo, aprende que los demás también se equivocan y que tienen sus malos momentos. El perdón, en ocasiones, es egoísta, y no importa. Perdona para poder olvidar lo que te han hecho o dicho, tú eres más que todo eso. Además, la empatía hará que comprendas el por qué otras personas pueden hacerte sentir mal.
Identifica claramente la situación que hace que estés triste
¿De veras te sientes triste por la situación que crees? Quizás es por un conjunto de situaciones, identifícalas una por una y hazles frente por separado. Verás que hay algunas que no merecen que te entristezcas. Además, ten en cuenta que el estrés y la ansiedad minan tu estado de ánimo. Es normal tener preocupaciones, pero si te obsesionas con ellas se vuelven miedos, el miedo paraliza y entonces no podrás salir de tu estado de ánimo. ¡Aprende a ser positivo!
Arréglate como si fuese un día especial
Todos los días de tu vida son especiales, deberías recordarlo constantemente, pero este día en el que estás con el ánimo bajo debe ser uno de los más especiales. Arréglate, ponte la ropa que te gusta, ve a la peluquería o hazte ese peinado que te sienta tan bien. ¡Tú eres especial! No debes olvidarlo.
Piensa en ti
Pensar en los demás está bien y es necesario, pero también debes pensar en ti. ¿Podías evitar lo que ha ocurrido? Si no estaba dentro de tus posibilidades, no debes darle más vueltas, si lo estaba y no has reaccionado de la manera correcta, has tenido un fallo como todas las personas, el mundo no va a acabar ahí. Aprende de lo que te ha ocurrido, habla contigo, guarda 5 minutos de silencio al día y la próxima vez todo será mejor.