Existen personas que saben, y les gusta, escuchar a los demás en mayor o menor medida. Estas personas suelen quedarse en silencio mientras le hablan, escuchan con atención todo lo que les dicen y, o bien se ponen en su lugar y le ayuda a encontrar soluciones, o escuchan para aprender. Eso está muy bien, escuchar es primordial para avanzar. Sin embargo, se puede caer en la costumbre de escuchar a los demás para no escucharse a uno mismo; ello es como huir de la propia realidad.
Escucharse a sí mismo es necesario, préstate atención cinco minutos al día como si te hablase otra persona, quédate en silencio para escucharte, para saber lo que realmente quieres y lo que necesitas, lo que sientes y cómo te sientes. Al estar en silencio entrarás en un estado de meditación, en el que tus pensamientos irremediablemente van a surgir, puedes dejarlos pasar y elegir el aquí y ahora. A través del silencio podrás cambiar muchas cosas de tu vida, pero además estar en silencio 5 minutos al día te proporcionará otros beneficios. Descúbrelos todos a continuación.
¿Cómo puede ayudarte guardar silencio durante 5 minutos?
Muchos expertos aconsejan guardar silencio durante 5 minutos al día para centrarse en el "aquí y ahora" y trabajar la respiración. De hecho, puede ser un hábito ideal para empezar el día con buen pie, además de proporcionarte grandes beneficios, como los siguientes:
Activa el sistema inmunológico
Practicando el silencio unos minutos al día, se fortalecerá tu sistema inmunológico en unas semanas. Al estar en un estado de meditación aumenta la actividad del hipocampo derecho, de la corteza prefrontal y de la ínsula anterior derecha. Todas ellas controlan las emociones positivas, la ansiedad y la conciencia, actuando también como centro en el que se dan las órdenes al sistema inmunológico. Al activar estas partes del cerebro se estimula el sistema inmunológico.
Ayuda a regenerar el cerebro
Durante la noche las células del cerebro se regeneran. Durante el día, podemos ayudar a ello estando en silencio cuando descansamos, ya sea en el trabajo o durante el estudio. A través del silencio se estimula la regeneración neuronal.
Previene problemas del corazón
Al estar unos minutos en silencio la presión sanguínea disminuye, ocurre lo contrario cuando estamos hablando o escuchando sonidos. Además, a través del silencio también se reduce la presión arterial, ello hace que se puedan prevenir enfermedades cardiovasculares derivadas de una tensión alta.
Aumenta la capacidad de concentración y la creatividad
El exceso de ruido hace que el cerebro esté atento a varios estímulos a la vez. A través del silencio tu cerebro solo se concentrará en lo necesario, además de que descansará. Asimismo, cuando estás en silencio puedes ser una persona más creativa al centrarte únicamente en tus ideas y sentimientos dejándolos aparecer.
Ayuda a la resolución de problemas
Al estar en silencio aumentan nuestras capacidades cognitivas, ello hace que podamos resolver problemas, concentrarnos, ordenar la información, aumenta nuestra capacidad de comprensión, nuestra percepción y nuestra memoria. Por si fuera poco, podrás entrar en un estado de relajación, ello hará que se reduzcan los efectos del estrés en la salud de todos.
Previene la depresión y la tristeza
Al estimularse el sistema inmunológico y ayudar en la regeneración neuronal, al estar en silencio se previenen enfermedades que pueden dar lugar a la depresión. El estado de relajación que proporciona el silencio nos aporta bienestar, ello hará que la tristeza disminuya. Además, al estar en silencio es cuando nos encontramos de verdad con nuestros sentimientos, y es cuando podemos ponerlos en el lugar que les corresponde y hacer frente a ellos.
Disminuye la ansiedad
Al estar en silencio todo parece más lento, no tienes que preocuparte de lo que va a ocurrir después, simplemente estás ahí en ese momento. Entonces, la ansiedad por lo que debes hacer o lo que va a ocurrir desaparece, quizás descubras que ni siquiera era necesario preocuparse.