El deporte es necesario en todas las edades. Ya desde pequeños, los niños hacen deporte y a través de él no únicamente desarrollan su cuerpo y equilibrio, también les ayuda a concentrarse, aumenta su autoestima, aprenden a trabajar en equipo, conocen la empatía y la esencia de la deportividad, que es la competición justa y aceptar las derrotas con dignidad para aprender de ellas. Los niños también aprenden a ganar siendo humildes. Conoce todos los beneficios del ejercicio físico para el bienestar emocional, a continuación.
Beneficios emocionales del ejercicio físico en adultos
En el momento en el que una persona decide hacer ejercicio físico cambia su mentalidad, y con ella la manera de ver las cosas y enfrentarse a los problemas. El hecho de estar en movimiento nos ayuda a tener una perspectiva distinta, tanto si se practica algún deporte como si únicamente se camina todos los días.
En las emociones, el ejercicio físico está indicado en casos de depresión, de enfermedad mental, que también provoca depresión a quien la sufre, y en casi todas las enfermedades. El motivo es que al practicar deporte se estabilizan una serie de proteínas endógenas que actúan sobre el sistema nervioso central, ello evita algunas enfermedades. Entre estas proteínas endógenas se encuentran las endorfinas, que hacen que se sienta felicidad y relajación.
Así, la importancia del ejercicio físico para el bienestar emocional es muy elevada. Además de conocer los beneficios del ejercicio para el corazón y para todo el organismo en general, los beneficios del ejercicio físico para el estado emocional son:
- Aumento de la autoestima y la confianza en uno mismo
- Mejora de la memoria y previene el Alzheimer
- Ayuda a relacionarse socialmente
- Mejora la capacidad intelectual
- La persona que practica deporte aprende a ser más independiente
- Aumentan las defensas del organismo y se refuerza el sistema inmunológico
- Mejora el rendimiento académico, pues influye en la memoria de trabajo y en la transmisión y flexibilidad cognitiva
Beneficios emocionales del ejercicio físico en la tercera edad
El ejercicio físico se puede, y se debe, practicar a cualquier edad. Especialmente cuando ya entramos en la tercera edad mover nuestro cuerpo es de suma importancia, no únicamente prevenir enfermedades como la artrosis o la artritis, también para la mente y las emociones. Las personas mayores que practican ejercicio físico obtienen:
- Se retrasa el envejecimiento del cerebro, previniendo así las faltas de memoria y enfermedades como la senilidad
- Previene el Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas
- Evitan la soledad y de ese modo también la tristeza
- Ayuda a mantener un peso adecuado
- Baja la proporción de grasa en el cuerpo
- Disminuye el insomnio y el estrés
- Reducen el riesgo de sufrir depresión
- El ejercicio físico hace que se liberen endorfinas, ello produce sensación de bienestar y felicidad
En todas las edades, incluidos los niños, antes de empezar a realizar deporte es necesario acudir a un médico. Cada persona y cuerpo son distintos, también las necesidades y capacidad de cada uno, por lo que no se puede empezar a practicar deporte sin saber la capacidad de resistencia que se va a tener, también pueden existir enfermedades ocultas. Siempre es recomendable la paciencia, la resistencia irá en aumento conforme se vaya practicando deporte.