Cómo consumir alimentos ecológicos para cuidar nuestra salud

Cada vez más, las personas intentamos cuidarnos mientras nos alimentamos. Ello no quiere decir ayunar ni tampoco pasar hambre, ese tipo de dietas pasaron a la historia por lo inadecuadas que resultan para la salud y la poca efectividad que siempre han tenido. En la actualidad, existen alimentos que ayudan a mantener el equilibrio de nuestro organismo, también el metabolismo y a la vez nos facilitan alcanzar nuestro peso ideal. Avena, jengibre, calabaza o cúrcuma son solo algunos de los conocidos como superalimentos, que podemos combinar con el resto de comidas que realicemos durante el día.

Alimentos ecológicos para tu salud

¿Cómo incorporar estos alimentos ecológicos a nuestra dieta?

A veces pensamos que es complicado cuidarse y que los alimentos saludables resultan poco sabrosos y no llegan a saciarnos. Pero nos equivocamos de pleno, ya que la clave es integrar estos alimentos del modo correcto en nuestros platos. Marcas de alimentos ecológicos como, por ejemplo, El Granero Integral, nos facilitan ideas y diferentes recetas en su web para incorporarlos a nuestro día a día.

A continuación veremos algunas de ellas, pero antes nos detendremos en tres aspectos que te ayudarán a elegir los alimentos ecológicos que más te convienen y a sacarles el máximo partido:

  • En primer lugar, es importante controlar las intolerancias y alergias que tengamos. En muchas ocasiones las indigestiones, las digestiones pesadas o los problemas estomacales se deben a que existe algún tipo de ingrediente o producto que nuestro cuerpo no tolera correctamente. Realizar una prueba sobre las intolerancias nos ayudará a empezar a vivir sin ese elemento que nos resulta indigesto.
  • Existen temporadas en las que nuestro cuerpo está falto de hierro, de calcio, de minerales o de vitaminas, entre otros. Los complementos alimenticios proporcionan a nuestro cuerpo todas las deficiencias que pueda tener por defecto o por estar pasando una época más débil. Son sencillos de tomar y hacen recuperar la fuerza y los nutrientes necesarios si llevamos un buen seguimiento del tratamiento.


  • También la forma de cuidarnos exteriormente afecta a la salud de nuestro organismo. La aromaterapia, por ejemplo, es una forma de cuidar nuestro cuerpo desde fuera, que puedes emplear para potenciar los efectos de tu alimentación saludable. La aromaterapia ayuda a mejorar todos los aspectos complicados de nuestra vida y nos ayuda a sobrellevarlos, llenar nuestra vida de tranquilidad y tomarnos la vida de otro modo.

Crea tus propias barritas energéticas germinadas

El complemento alimenticio que proporciona más energía a deportistas y no deportistas son las barritas energéticas. Son fáciles de elaborar y perfectas para tomar en cualquier momento. Éstas se realizan con copos de avena germinada, crema de almendras, supralimento de jengibre bio, sirope de ágave, semillas de calabaza, de girasol, de sésamo crudo, de chía, arándanos sin azúcar, agua y un poco de sal marina.

Elabora un riquísimo batido energético sport

Tanto si tienes por costumbre hacer ejercicio físico como si no, tras un día de duro trabajo seguro que llegas a casa con pocas ganas de prepararte un plato muy elaborado. Así que, de forma extraordinaria, puedes suplirlo por un batido con avena, medio aguacate, medio plátano, una cucharada de cacao en polvo de cultivo ecológico, una cucharada de supralimento proteína deportistas bio de El Granero Integral y dos cucharaditas de sirope de ágave. Pásalo todo por la licuadora y conseguirás el batido perfecto para aumentar tu energía.

Prepara tus propias tortitas de quinoa

Receta de tortitas de quinoa

Las tortitas siempre son un alimento acertado para desayunar o merendar, y además existen formas más sanas de prepararlas, introduciendo ingredientes como la quinoa. ¿El resultado? Igual de sabroso y mucho más nutritivo. Basta con 150 gramos de harina de trigo bio, 300 ml de bebida de almendra, medio plátano, una bolsita de levadura, 3 huevos, 3 cucharadas de supralimento Quinoa Instant Bio, aceite de oliva y un poco de sal. El procedimiento es el mismo que se lleva a cabo con las tortitas convencionales, mezclando todos los alimentos y pasándolos por la sartén muy caliente con un poco de aceite.