Muchas personas no logran dormir bien o lo suficiente y acaban teniendo serios problemas de salud, como dolores de cabeza intensos, contracturas musculares, problemas dentales,... Dormir implica relajar mente y cuerpo para conseguir levantarnos al día siguiente descansados y poder continuar así con la rutina al cien por cien. Uno de los mejores consejos para dormir bien que dan los expertos es dormir una media de ocho horas al día. Eso no significa que, si duermes menos, estés poniendo en riesgo tu salud, sino que es importarte adquirir hábitos de sueño regulares que nos ayuden a sentirnos mejor, con más energía y optimismo.
Sigue leyendo para conocer los mejores consejos para dormir bien. Descubre cómo dormir mejor con unos pequeños cambios en tu rutina diaria.
Horario de sueño regular
Para conseguir dormir bien es necesario organizar nuestros ciclos del sueño y ser constantes. Si quieres aprender a calcular los ciclos del sueño y la hora a la que debes dormirte para respetarlos y descansar, descubre aquí una herramienta muy práctica para hacerlo. No olvides que seguir un horario de sueño regular implica acostarse y levantarse siempre a la misma hora o, como mucho, no variar mucho los horarios. Por ejemplo, si entre semana te levantas a las siete de la mañana para irte a trabajar, lo ideal es que los fines de semana no te levantes más tarde de las nueve, salvo que hayas trasnochado. Con una rutina de sueño regular tu "reloj biológico" no sufrirá y no hará que estés despierto a altas horas de la madrugada cuando tengas que ir a trabajar al día siguiente.
Siestas sí, pero mejor cortas
Las siestas, ese decir, esos momentos que dedicamos a dormir después de comer, son beneficiosas para continuar con energía el resto del día, siempre y cuando les dediquemos un máximo de 20 minutos. La verdad es que vienen fenomenal para reponer fuerzas y retomar la jornada. Intenta hacer siestas cortas, ya que así evitarás que por la noche no consigas conciliar el sueño.
Di no al tabaco, y alcohol con moderación
Seguro que conoces los daños que causan tanto el tabaco como el alcohol en la salud de las personas. También resultan un gran enemigo del descanso. Por un lado, la nicotina del tabaco produce un efecto en nuestro organismo que dificulta que podamos dormir con facilidad. Por otro lado, el alcohol afecta al sistema nervioso, de manera que podemos quedarnos dormir rápidamente. Sin embargo, este efecto desaparece al cabo de poco tiempo y puede hacer que nos despertemos muchas veces a lo largo de la noche, lo cual no impedirá descansar. Además, el alcohol acentúa los problemas respiratorios relacionados con el sueño, como los ronquidos.
Haz ejercicio
Hacer ejercicio forma una de las premisas fundamentales para llevar un ritmo de vida saludable y también para tener un buen descanso, ya sea running, pilates, yoga o baile. Pero, ¿de qué manera influye hacer ejercicio en dormir bien? Por un lado, si estamos más cansado, tendemos a dormirnos más rápidamente; por otro lado, se consigue un mayor porcentaje de sueño profundo y nos despertamos con menos frecuencia por las noches.
Toma alimentos que ayuden a dormir
Existen determinados alimentos que te ayudarán a dormir mejor, como por ejemplo, la avena, la manzanilla o los plátanos. También puedes probar con el clásico vaso de leche caliente antes de irte a dormir. Evita tomar bebidas con cafeína, sobre todo por las tardes, como café, té o refrescos, ya que provocan más problemas a la hora de intentar dormir.
Recuerda que tu cama y tu habitación son el templo de tu descanso, de orden, de paz y de tranquilidad. Intenta que tu zona de descanso esté oscura cuando vayas a dormir, relativamente fresca y ordenada. Mantén la temperatura de tu dormitorio entre 16 y 18ºC e intenta adquirir una posición para dormir adecuada para conseguir un sueño placentero y reparador. Esperamos que estos consejos para dormir te ayuden a descansar y a sentirte mejor en los brazos de Morfeo. ¡Dulces sueños!