Buenos hábitos para prevenir el dolor de espalda

Consejos para evitar el dolor de espalda

Las posturas que adoptamos en el día a día son fundamentales a la hora de mantener un buen estado de salud en la zona de la espalda. Y es que, tanto si trabajamos sentados como si lo hacemos de pie, hemos de tener en cuenta una serie de consejos para mantener alejado el dolor de espalda y prevenir futuras molestias.

Las hernias de disco, la estenosis espinal o la escoliosis son solo algunos de los problemas más frecuentes que pueden afectar a la espalda y a la columna vertebral. Con la realización de las pruebas pertinentes, se pueden diagnosticar todas estas enfermedades que provocan el dolor de espalda. Y, para ello, tener un seguro médico es una gran opción.

Así que, si padeces dolor de espalda, deberás informarte para encontrar un seguro médico a tu medida, que encaje con lo que realmente necesitas.

Pero, antes que nada, también es importante seguir algunas recomendaciones para cuidar tu espalda y mantenerla sana y protegida. ¡Apunta!

¿Cómo prevenir el dolor de espalda?

Sufrir dolor de espalda es algo mucho más frecuente de lo que pensamos. Tanto es así que se estima que 4 de cada 5 personas sufrirá dolor de espalda en algún momento de su vida.

Adoptar malas posturas o no practicar ejercicio físico son algunos de los factores que multiplican las posibilidades de padecer dolor de espalda. Sin embargo, esto se puede prevenir poniendo en práctica unos sencillos consejos:

Cuidar la postura corporal

Tanto si trabajas sentado como si lo haces de pie, tus pies deben apoyarse por completo en el suelo. Debes fijarte en que las rodillas deben estar al mismo nivel o un poco más elevadas que la cadera, especialmente cuando trabajas sentado.

Asimismo, debes apoyar la espalda y mantener los hombros bien erguidos en la silla que utilices para trabajar. Si usas ordenador, la pantalla tiene que estar a la altura de los ojos.




Por otro lado, también es importante que evites sostener el teléfono entre la oreja y el hombro cuando hables por teléfono. A su vez, deberás hacer descansos regulares para levantarte y cambiar de postura.

Aprender a levantar objetos pesados

Si en tu rutina diaria te ves obligado a levantar peso, siempre debes hacerlo levantando y flexionando las rodillas. No lo hagas desde la cintura, ya que te harás daño en la espalda. Lo importante es que mantengas la espalda recta al realizar este movimiento.

Hacer ejercicio de forma frecuente

El ejercicio físico ayuda a disminuir el riesgo de sufrir dolor de espalda. Para prevenir problemas en la zona lumbar, se recomienda la realización de actividades como la natación o las caminatas por tierra o asfalto.

Pero, también hay ejercicios específicos para fortalecer la espalda. Para conocerlos, puedes asistir a la consulta de un experto en fisioterapia. Y, si el dolor que sufres es crónico, debes consultar previamente con tu médico antes de iniciar cualquier tipo de actividad, ya que hay ejercicios que no están recomendados para quienes padecen dolores de espalda crónicos.

Evitar los movimientos repetitivos

Los gestos que se hacen constantemente pueden acabar por provocar una sobrecarga al movilizar siempre la misma zona.  Si debes hacer alguno de estos movimientos por obligación, ejecútalos correctamente y descansa con cierta frecuencia.

Cuidar el peso

Para mantener una buena salud en la espalda, es importante que mantengas un peso adecuado, ya que los kilos de más suponen una sobrecarga para la espalda. Para mantener el peso apropiado, debes llevar una dieta equilibrada y hacer ejercicio físico con regularidad.

Elegir el calzado apropiado

Elegir unos zapatos cómodos que repartan la carga por toda la planta del pie es otra de las claves para evitar el dolor de espalda.

Escoger un colchón y una almohada adecuados

El colchón y la almohada no pueden ser ni demasiado blandos ni demasiado duros y tienen que estar en buen estado. Se recomienda, en este caso, dormir boca arriba o ligeramente de lado para mantener la espalda recta en todo momento.

No pasar mucho tiempo de pie

Si el trabajo te obliga a permanecer muchas horas de pie, debes buscar un escalón o cualquier accesorio similar que te permita apoyar un pie e ir alternándolo con el otro cada cierto tiempo. De este modo, reducirás los dolores en la espalda.

Como ves, con estos sencillos consejos, podrás cuidar la zona de la espalda y la lumbar. Y, en caso de necesitar consultar con un especialista, un seguro médico privado puede ser una gran opción.