Los calambres suelen ser inofensivos en un principio, pero qué es lo que pasa cuando este padecimiento se agrava. ¿Qué puede pasar cuando un calambre se vuelve crónico? ¿Cómo lo combatimos? En este artículo veamos algo más acerca de esta disfunción de nuestro músculos.
Pese a que en su etapa inicial los calambres son contracturas que no presentan síntomas muy graves y, además, que se pueden aliviar con masajes muy básicos, algunos pueden indicarnos algo más que una falta de calentamiento.
En algunos casos los calambres pueden ser graves signos de males que aquejan a nuestro organismo y de forma muy variada. Sin embargo, esto se suele dar bajo la condición de tener calambres crónicos.
Una baja en las defensas de nuestro organismo (ocasionado por cualquier enfermedad) probablemente tendrá como consecuencias dolores musculares, calambres. Afectaciones arteriales, renales, o de las tiroides pueden presentarse como signos de los calambres.