Descubre cómo cuidar tus articulaciones a diario

Cómo cuidar las articulaciones

Las articulaciones permiten que podamos girar y doblar las partes de nuestro cuerpo. Con el tiempo se desgastan, si se practican ciertos deportes se resienten más rápidamente. El cuidado diario de las articulaciones es necesario en todas las edades y todos los casos para evitar, en el caso del sedentarismo, que se queden atrofiadas y den lugar a enfermedades y, en el caso de una actividad que las fuerza constantemente, prevenir su desgaste. Sigue leyendo para saber cómo cuidar tus articulaciones y qué puedes hacer para protegerlas cada día para mejorar tu bienestar en cada momento.

Hábitos para cuidar tus articulaciones y huesos todos los días

En cualquier trabajo, actividad y en todo momento de tu vida cotidiana necesitas tus articulaciones. Para escribir con el ordenador, para caminar, cocinar, vestirte… todo lo que haces en cada momento de tu día sin que te des cuenta lo puedes hacer con mayor facilidad gracias a que tus articulaciones te permiten los movimientos. Descubre los mejores consejos para cuidar las articulaciones y los huesos todos los días:

1. Corrige tu postura corporal

En cualquier momento del día siempre debes mantener la postura adecuada, incluso cuando duermes. Una postura inadecuada fuerza las articulaciones, lo que te provocará dolor y ello va a influir en tu calidad de vida tanto física como mental y social. Evita también los movimientos repetitivos pues ello repercutirá en las articulaciones que utilices para hacerlos. Si no puedes evitarlos, cesa esos movimientos durante unos minutos para poder descansar.

2. Practica ejercicio físico moderado

Caminar, correr o nadar regularmente hará que tus articulaciones funcionen correctamente. Si realizas otros tipos de deportes que requieren más resistencia, deberás hacerlo de una manera inteligente. No le pidas a tu cuerpo más de lo que puede dar, lo conseguirás de manera paulatina, pero si te fuerzas en exceso solo conseguirás dañar tus articulaciones. La edad y los hábitos tienen mucho que ver en la resistencia de tu cuerpo, los cuidados que se necesitan a cada edad son distintos y también dependiendo de si, antes de decidir hacer deporte, eras una persona con tendencia al sedentarismo.

3. Controla tu peso

Procura mantener un peso aproximado al que deberías tener dependiendo de tu sexo y estatura, de lo contrario se resentirán tus articulaciones y también tus huesos.

4. Descansa

El descanso es necesario, tanto si realizas deportes como si no; recuerda que tus articulaciones funcionan a cada momento de tu día a día e incluso mientras duermes. Descansa lo suficiente y trata de dormir bien cada noche.

5. Haz estiramientos a diario

No solo el ejercicio físico ayuda al corazón y a las articulaciones, también los estiramientos. Aunque no realices deportes de gran intensidad, o ninguno, realiza estiramientos suaves todos los días.


6. Abandona los malos hábitos

El alcohol y el tabaco pueden ser perjudiciales también para tus articulaciones, evita excederte si bebes alcohol y procura dejar el tabaco si eres una persona fumadora.

7. Cuida tu alimentación

La nutrición también repercute directamente en la salud de nuestros huesos y articulaciones. De hecho, existen alimentos que nos ayudan a mantener nuestras articulaciones, entre ellos se encuentran:

  • Vegetales. Garbanzos, espinacas, col, lentejas… aportan proteínas al organismo, necesarias para fortalecer las articulaciones.
  • Vitamina D. Necesaria para la formación de cartílagos y huesos. La obtenemos del sol y también de algunos alimentos como el salmón, los huevos, aceite de hígado, jamón, embutidos… entre otros.
  • Vitamina C. Regenera los tejidos del cuerpo y es esencial para producir colágeno, necesario para regenerar los cartílagos. La encontrarás en el limón, el kiwi y la naranja, espinacas, acelgas, almendras, pipas de girasol y de calabaza, avellanas, col rizada y hojas de nabo, entre otros.
  • Vitamina A. Es antioxidante y protege de los radicales libres. Te la proporcionará los pimientos, zanahorias, tomates, calabaza, leche, mantequilla, ternera, pescado y pollo.
  • Minerales. Para que las articulaciones estén fuertes es necesario que aportes a tu cuerpo calcio, fósforo, flúor y magnesio, lo podrás obtener de estos alimentos:
  • Calcio. Endivias, acelgas, aceitunas, perejil, escarola, apio, nabos, pescados, marisco, espárragos, lácteos…
  • Fósforo. Pollo, pavo, almendras, pesados, leche y productos derivados de la leche, avellanas, entre otros.
  • Flúor. Frutas y hortalizas, lácteos, pescados, mariscos, vegetales…
  • Magnesio. Pipas de girasol y de calabaza, anacardos, almendras, plátanos…