Los trigliceridos son un tipo de grasa y el cuerpo produce algunos de ellos. Los trigliceridos también provienen del alimento que una persona come. Se puede hacer un examen de sangre, llamado nivel de trigliceridos, para medir la cantidad de éstos en la sangre.
Cuando uno come, el cuerpo usa las calorías para obtener energía inmediata. Las calorías sobrantes se convierten en trigliceridos y se almacenan en las adipocitos para su uso posterior. Si una persona come más calorías de las que su cuerpo necesita, su nivel del trigliceridos puede ser alto.
TRIGLICÉRIDOS ELEVADOS
Reciente meta-análisis de varios estudios prospectivos indican que los triglicéridos elevados son también un factor de riesgo independiente para la enfermedad coronaria.
Los factores que contribuyen a unos triglicéridos elevados (más elevados de lo normal) en la población en general incluyen la obesidad y el sobre peso, la inactividad física, el tabaco, el exceso de alcohol, una dieta muy rica en carbohidratos (>60% de las calorías), algunas enfermedades (diabetes tipo 2, insuficiencia renal crónica, síndrome nefrótico), algunos fármacos (corticosteroides, estrógenos, retinoides, dosis altas de fármacos b-bloqueantes), y desórdenes genéticos (hiperlipidemia familiar combinada, hipertrigliceridemia familiar y disbetalipoproteinemia familiar).
En la práctica clínica, los triglicéridos plasmáticos elevados se observan más frecuentemente en las personas con el síndrome metabólico, aunque otros factores secundarios o genéticos pueden también influir. Esta guía, en su versión III adopta la siguiente clasificación para los triglicéridos séricos:
- Triglicéridos normales : <150 mg/dL
- Triglicéridos marginalmente elevados: 150-199 mg/dL
- Triglicéridos altos: 200-499 mg/dL
- Triglicéridos muy altos: 500 mg/dL