Es una enfermedad crónica respiratoria caracterizada por dificultad para respirar debido al estrechamiento de los bronquios y los bronquíolos. Se presenta con frecuencia en personas alérgicas.
Las crisis asmáticas suelen ocurrir en primavera y otoño o con condiciones climáticas adversas como cuando se presentan tormentas y en algunos solamente el aire frío puede ocasionarles este mal.
A veces es causado, igualmente, por la hiperventilación, algunos medicamentos o químicos, los ejercicios físicos agotadores, hipoglucemia, infecciones respiratorias (bronquitis), las emociones intensas y emotivas (pánico o ansiedad, preocupaciones y angustias), el pelaje de animales (gatos, perros, conejos, etc.), humo del tabaco, polvo en la casa o aditivos de comidas comerciales (meta bisulfitos, glutamato monosódico, caseinato sódico y cálcico).
Los síntomas del asma más comunes son:
- Pulso rápido, más de 90 pulsaciones por minuto.
- Tos y expectoración.
- Dificultad al respirar.
- Silbidos al exhalar el aire y no al inhalarlo.
- Disnea o fatiga
Evidentemente, el asma debe ser objeto de una observación médica. Sin embargo, existen algunos remedios naturales para el asma, utilizados en la antigüedad, y que pueden ser empleados de forma complementaria siempre que el doctor lo estime conveniente.