Síntomas físicos del síndrome de burnout
Como ya conocemos, en cierto punto el síndrome de burnout tiene la capacidad de anular todas las emociones positivas que podamos sentir durante el trabajo. El exceso de ocupaciones en este padecimiento genera estrés, la falta de motivación, el cansancio en las relaciones con las demás personas, y una total ausencia de buen trato como síntomas patentes de este padecimiento.
Tanto así que el síndrome de burnout puede llegar a tener consecuencias físicas además de las emocionales. Los problemas sin resolver se van convirtiendo gradualmente en dolores de cabeza. Las preocupaciones crecen y se convierten en momentos de somnolencia que se acentúan, la fatiga es más fuerte, nos contracturamos; comenzamos a sentir hipertensión. Hay que tratar el problema a tiempo si no queremos padecer estos problemas psicosomáticos.